viernes, 17 de septiembre de 2010

Lenguaje que sale energia que entra

Gracias Ale por contribuir con el solo hecho de pensar, en que algo es necesario cambiar ...
hay una particularidad de gaia, y es el hecho de como viaja la informacion...ya en el punto en que se acuña en nuestra mente emite un destello que recorre todo el cuerpo a una velocidad imposible de percibir, esta informacion, idea, sentimiento, etc. sale de nuestro cuerpo transformada en vibraciones que son transpasadas a cualquier energia que este englobandonos... es una cadena que nunca termina, y que por esa maravillas de la vida, en algun ponto retorna a nosotros y hace un reconocimiento de su fuente(nosotros mismos).
Esta energia o vibracion despues de tanto recorrer el firmamento fue creciendo, ya es madura, ahora ya tiene la capacidad de mover a otra energias y ser utilizadas a nuestro antojo...tener un cuenta que obviamente hay energias buenas y malas, y por suerte las buenas tienen mejor velocidad.

Ale T., lo de la canoa seria genial...si la puedes conseguir?, adelante, por favor!

3 comentarios:

  1. Que interesante y, porque no, divertido pensar asi.
    De alguna manera es mas divertido porque de alguna extraña razon creo en ese tema del que hablaste, como fundamento de vida.
    Es muy alentador conocer personas con el fuego interior.
    Genial!

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  2. Bueno, teno una buena noticia, un amigo y su canoa quieren aportar a esta causa.
    me estaba contando que tenemos que ver bie por donde bajar la canoa. pero.. creo q se puede. pensemos como y listo!
    salud!

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  3. El mundo
    Un hombre del pueblo de Neguá, en la costa de Colombia, pudo subir al alto cielo.
    A la vuelta, contó. Dijo que habia contemplado, desde alla arriba, la vida humana. Y dijo que somos un mar de fueguitos.
    -" El mundo es eso" - reveló-. Un montón de gente, un mar de fueguitos.
    Cada persona brilla con luz propia entre todas las demás. No hay dos fuegos iguales. Hay fuegos grandes y fuegos chicos y fuegos de todos los colores. Hay gente de fuego sereno, que ni se entera del viento, y gente de fuego loco, que llena el aire de chispas. Algunos fuegos, fuegos bobos, no alumbran ni queman; pero otros arden la vida con tantas ganas que no se puede mirarlos sin parpadear, y quien se acerca, se enciende.

    Eduardo Galeano (El libro de los abrazos)

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